¿Qué queremos hacer cuando seamos gobierno?

Esta interrogante planteó Oscar Landerretche, Coordinador programático del comando de Eduardo Frei Ruíz -Tagle, quien en el desayuno del mes de octubre del Diálogo Público Privado del CED, explicó cómo buscando solución a esta problemática, se realizó un profundo proceso de reflexión que llevó, cabalísticamente, a un diagnóstico central, resumido en 4 puntos claves, al que siguieron 4 propuestas de transformación económica de fondo; 4 desafíos estratégicos complementarios y 4 conclusiones políticas.Landerretche señaló que los Diagnósticos Centrales dieron los siguientes resultados resumidos en estos puntos claves:

– Recurso Humano: Sobre este tema se descubrieron situaciones que develan que éste es un problema serio y complicado de abordar, ya que nuestro país presenta un déficit de alfabetismo funcional adulto superior al 60%, además de déficit y mala distribución de la calidad escolar; bajo interés en la capacitación, acompañado de poca compatibilidad entre vida laboral y educativa y un funcionalismo excesivo respecto de la educación.

– Rol del Estado: Desde el año 1990 a la fecha, el Estado ha aumentado su gasto un 160%, sin embargo su planta completa (considerando todas las formas contracatuales) sólo en un 60%. Se han elevado las funciones del Estado y sus trabajadores han debido asumir alrededor de 3 procesos más que los que realizaban hace 20 años, con igual o menor capacitación. Además, se hace evidente que el Estado debe enfrentar nuevos desafíos regulatorios; en áreas como el fomento productivo; coordinación de políticas; evaluación; modernización y de transparencia.

– Nuevos Sectores: Landerretche fue enfático al señalar que no existe experiencia internacional sobre países que hayan alcanzado el desarrollo basándose, exclusivamente, en las exportaciones de sus recursos naturales, ya que ello sólo genera riqueza. Si bien este puede ser un primer paso, es necesario que luego se expandan hacia otros sectores y productos, diversificando sus exportaciones las que hoy, en nuestro caso, se concentran en un 75% en 25 productos (que además, alrededor de 20 de ellos son los mismos que se exportaban hace 30 ó 40 años), proporción que debería alcanzar sólo al 30%. En síntesis, esto demuestra que nuestro país enfrenta una concentración excesiva; poca diversificación; lenta transición hacia sectores de mayor valor agregado; poca innovación y la ausencia de una política destinada a generar nuevos sectores.

– Rol del Mercado: este punto, muy relacionado con el anterior, lleva a encarar los desafíos de la competencia; de la inclusión; de la autorregulación; responsabilidad empresarial y el de las escalas salariales.

Luego de este diagnóstico, siguió el turno de las propuestas para alcanzar Transformaciones Económicas de Fondo, nuevamente resumidas en 4 puntos básicos:

– Reforma educativa, para el Coordinador, la clave de la situación actual está dada por el hecho de que si bien nuestro país gasta en educación entre un 6 y un 7% del PIB, muy similar al gasto finés, la diferencia se presenta en que mientras en Chile un 3% va al sistema público y la otra parte al privado, en Finlandia un 5% va dirigido al estatal. El objetivo es cerrar esta brecha en 10 años. Entonces, la reforma se debe orientar a alcanzar una educación de calidad; contra resultados; la carrera docente y la pública deberá basarse más en el mérito que en la antigüedad, todo ello con un alto compromiso financiero (que permita ir moviéndonos contra resultados) y con un indispensable compromiso político que genere estos cambios.

– Reforma laboral. Ella implica una reforma al Código del Trabajo (es sabido que éste cada vez más requiere de estatutos diferenciados, además de que su construcción está basada en la prohibición, cuando lo que se necesita es fomentar la cooperación entre los involucrados en una relación laboral); trabajar por lograr una verdadera negociación colectiva; incluir al sector público en estas reformas; fomentar el empleo y reducir la desocupación y, alcanzar un acuerdo nacional en esta materia.

– Estrategia de desarrollo. Landerretche fue enfático al señalar que no se requiere más dinero para el fomento productivo, sino que se necesita de una gestión acorde a estos objetivos. En síntesis, se precisa de un Ministerio del Desarrollo Económico; defender al emprendimiento emergente, poniendo énfasis y apoyando al re-emprendedor; defender al consumidor y fomentar los sectores estratégicos; la innovación, ciencia y tecnología y a la competencia.

– Economía Verde: Para ello se está trabajando en el desarrollo de energías renovables no convencionales (aprovechando las ventajas competitivas de nuestro país, como puede ser concretar la plataforma solar de Atacama y la de bioenergías en el sur basadas en deshechos forestales); economía del ahorro energético del hogar, de la empresa y del sector público y promulgación de una ley de Ahorro Energético.

Todo este análisis y propuestas van complementadas por, también 4, Desafíos Estratégicos, que son más empleo (participación laboral femenina; acuerdos de re-emprendimiento; acuerdos de empleo; subsidios al ingreso del trabajo; impulso a la capacitación e intermediación laboral); más energía (disponibilidad de energía a menores precios; seguridad energética; protección ambiental; ahorro energético y la importancia estratégica de la huella de carbono); más infraestructura (conectividad regional; Código de Aguas; agua embalsada; infraestructura urbana; conectividad a nivel nacional y nuevo impulso a las concesiones) y más protección (seguridad; protección y paz social, y progreso).

Estas reflexiones, necesariamente, dieron paso a Conclusiones Políticas de la mayor importancia (4): Así, se hace evidente la necesidad de transferir poder a los ciudadanos y consumidores, no sólo a nivel individual sino que también colectivo (regiones; juntas de vecinos), es decir es necesario asumir el desafío institucional de dejar atrás las políticas centralizadas. También es indispensable fortalecer la política para que mejoren las políticas, o sea, incentivar a los involucrados para que colaboren en esta tarea. Por otra parte, el Estado se debe fortalecerse y mejorar la regulación (para ello hay que reclutar a los trabajadores que esta tarea implique). Finalmente, se planteó la idea de generar un diálogo social que permita construir un conjunto de acuerdos nacionales, teniendo como eje el primer año de gobierno de Eduardo Frei.

Como es costumbre en estas actividades, al finalizar esta clara; moderna y amena exposición, los asistentes aportaron comentarios e ideas, siendo común denominador las felicitaciones por los planteamientos presentados y la manera como fueron mostrados a la audiencia, de una forma tal que se reconoció su aporte; contenido y lo estimulante de la propuesta. Pero también hubo acuerdo y molestia por la falta de debate de ideas y sobre cómo esta campaña ha sido transmitida a la población basándose casi en lo anecdótico, cómo los medios han hecho nula réplica de las reales propuestas de futuro.