Jóvenes analizan las tareas del Socialcristianismo en tiempos de postmodernidad

La cuarta sesión del “Taller para jóvenes socialcristianos”, organizado por el CED, contó con la participación de Eduardo Silva S.J. -Decano de Filosofía y Humanidades de la Universidad Alberto Hurtado- quien compartió con los jóvenes y los invitó a reflexionar sobre el tema “Catolicismo Social: Porvenir de una tradición en crisis”.
La presentación tuvo como eje el artículo del mismo nombre publicado por Eduardo Silva el año 2009, y en ella se planteó desde el actual escenario global cómo la postmodernidad ha propiciado el avance de un ambiente cultural favorable para el capitalismo.
De ahí que su discurso se centrara en la importancia de la constitución de sujetos como contrapeso a la cultura individualista imperante. Indicó que en occidente esta tarea ha sido enfrentada por tres tradiciones principales: El teísmo, la ilustración y el romanticismo, las que -para cumplir con este objetivo- necesitan tener la capacidad de crear una oferta de proyectos con sentido, que generen felicidad y deseen convencer. “Si no hay constitución de sujetos no hay política.”

En nuestro continente -específicamente en nuestras sociedades latinoamericanas- el catolicismo, el pentecostalismo, el new age y la increencia han sido las tradiciones que han constituido sujetos. Sin embargo, hoy somos testigos presenciales de cómo los espacios y tareas de estas líneas de pensamiento, están siendo cooptadas por el liberalismo económico.

Romper con esta realidad requiere que el cristianismo sea capaz de pactar con aquellas tradiciones que aprecian la igualdad y la diferencia.

Respecto del socialcristianismo dijo que la aparición del catolicismo social a finales del siglo XIX “hace perder sentido a la disputa liberal-conservadora, pues pone el foco en la cuestión social”. Pero hoy, tras la caída del muro de Berlín, el catolicismo social requiere de una nueva versión.

A juicio de Eduardo Silva, el gran signo de los tiempos es la globalización financiera y el individualismo moral, y no la moral sexual o familiar. Es por ello que, en ciertos aspectos importantes, el marxismo ha sido un gran aliado para el catolicismo. Además, señaló que a esta tarea se deben sumar las tradiciones vivas en nuestras sociedades -provenientes, como se señaló, tanto del mundo religioso como del laico- pues entregan los recursos claves e indispensables para intentar dar solución a los desafíos sociales de nuestros tiempos y realidades.

Finalmente señaló que el cristianismo tiene 3 aportes significativos que hacer al mundo en este nuevo contexto:
1. La opción preferencial por los pobres
2. La construcción de vínculos no abstractos, como creación de asociatividad y comunidad.
3. Un “ethos de vida buena”, como aspiración a la virtud y la excelencia.
El calendario de actividades de estos talleres continúa con la quinta sesión el próximo miércoles 12 de junio. El expositor será Sergio Micco, quien realizará un “Balance del pensamiento Socialcristianismo”.