“Los niños requieren de apego y lactancia pero en igualdad de condiciones”

Con una visión compartida sobre “Los dilemas del proyecto de post natal”, se dio inicio a las actividades del año 2011 del Diálogo Público Privado del CED. La expositora encargada de abrir el ciclo fue la Ministra del Trabajo y Previsión Social, Evelyn Matthei.

La autoridad de Gobierno, agradeció la invitación y destacó que estos encuentros revisten una gran oportunidad para reunir a diferentes actores que comparten la preocupación por el futuro del país.

Antecedentes

Contextualizando el proyecto que fue objeto del análisis, la Ministra señaló que las políticas de trabajo y empleo son básicas para un país ya que sin buenos indicadores en estas materias es imposible alcanzar la paz social y el desarrollo.

Es por ello que esta idea se basa no sólo en las nociones de apego y lactancia, sino que tiene dimensiones más complejas e importantes para el desarrollo del país. Matthei destacó que la realidad actual para la gran mayoría de las mujeres en nuestro país es que en los quintiles más bajos aumenta su condición de jefas de hogar, pero su participación laboral es baja. Además, esto se ve reforzado por leyes deficientes que hacen que para el empleador sea más caro contratarlas; por malas redes y apoyos para el cuidado de los hijos, etc. Situaciones, entre otras, que han llevado a que Chile tenga la tasa de participación laboral femenina más baja de Latinoamérica. A juicio de la autoridad, todo esto explica la caída de la natalidad, la feminización de la pobreza y los altos niveles de niños entrando a este círculo.

Con estos antecedentes, y teniendo siempre como objetivo la entrega de herramientas que permitan que amplios sectores de la población de nuestro país salgan de la pobreza, la Ministra explicó qué considera el proyecto.

En primer lugar, con él se pretende lograr que las mujeres compatibilicen roles. Pese a que el más importante es el cuidado de los hijos, no tiene que ser necesariamente antagónico con el de mujer trabajadora. Alcanzar esto es básico, ya que los hechos constatan que a la mujer se le exige como al hombre, pero a ello se le añade la tarea más cansadora, el rol de madre. Resolviendo esto, también se conseguiría el primer objetivo del proyecto, a través del empleo, acabar con la pobreza.

El segundo propósito fue dar respuesta a una exigencia básica de la maternidad, los grandes períodos de cuidado que requieren los niños. Materializando esta idea, se conseguiría no solo la inserción laboral, también terminar con el uso fraudulento de licencias médicas, erradicando así una mala pero habitual práctica.

De esta forma, un proyecto que amplíe el período de cuidado, traería beneficios como la incorporación de la mujer a la fuerza de trabajo; el hombre incorporado al cuidado de los niños, la caída en los índices de pobreza y con ello un mayor crecimiento económico.

El Problema del actual post natal

La Ministra fue clara al señalar que el subsidio maternal que existe hoy es muy regresivo, el 52% de los recursos que aporta el estado van dirigidos al quintil de más altos ingresos, en el que la mujer tiene más recursos ya que sus sueldos son más altos, y donde también tiene mayor participación laboral formal, es decir, con contratos de trabajo. Así, de los 253 mil niños que nacen en Chile, sólo 83 mil tiene derecho a post natal: otro gran problema, la falta de cobertura y la imposibilidad de reemplazar los ingresos.

Los costos del proyecto (contraargumentos)

La mano de obra menos calificada es más fácil de sustituir; el pago lo realiza el Estado no el empleador; el costo del reemplazo es sólo el de transacción, se reduce la incertidumbre del regreso al trabajo (con el sistema de licencias no se tiene certeza de este momento); hoy el post natal se extiende en la práctica a 5.5 meses, el proyecto implica un aumento real de 0.5 meses.

Objetivos del proyecto

Ellos fueron sintetizados en: extender el post natal a 6 meses; incentivar la corresponsabilidad de padres y madres; mejorar la cobertura (incorporando a los trabajos por obra, plazo fijo, etc.), focalizar el gasto en las mujeres y sus niños; retorno con jornada parcial (que las mujeres de mayores ingresos y cargos de mayor responsabilidad no se desvinculen totalmente de sus trabajos y de esta forma no se vea afectado su desarrollo profesional), controlar el fraude en el sistema de licencias médicas ( factor que se ha demostrado afecta la empleabilidad y de manera brutal las finanzas públicas).

¿Qué falta?

Está identificado que la mayor tasa de baja participación laboral femenina está en el quintil de menores ingresos donde, paradojalmente, mayor cantidad de mujeres son jefas de hogar. Es por ello que se requiere atacar con medidas especialmente diseñadas para este grupo.

Además, ahora debe comenzar una larga discusión del proyecto, que apuntará a los temas más relevantes y también conflictivos, como la voluntariedad del retorno al trabajo y los mecanismos para alcanzar mayor y mejor cobertura.
Sin embargo -sostuvo la Ministra- es necesario abordar con decisión el problema, ya que es indispensable compatibilizar los diferentes roles de la mujer con el trabajo, ya que para que la lactancia y el apego se den en igualdad de condiciones, lo primero que se debe hacer es acabar con la pobreza, “la situación de pobreza afecta más al niño que el apego, es necesario sacar a las familias de la pobreza”. Para ello, aumentar la tasa de participación laboral es imprescindible.