Unanimidad: Alza tributaria y heterogeneidad estructural son las claves del desarrollo con equidad

El tercer taller del ciclo “Plataforma Política Opositora 2011-2014” reunió a los economistas Ricardo Ffrench-Davis y Mauricio Jelvez, quienes compartieron su visión sobre “La opción económica socialcristiana para el 2014″. La actividad fue presidida por la senadora Ximena Rincón y por el presidente del CED, Eduardo Saffirio.

Mauricio Jelvez, inició su exposición destacando la necesidad de concebir el desarrollo como un proyecto y no como una consecuencia del crecimiento, ya que esta mirada reduce el debate a la idea de que “todo es economía” y confunde crecimiento (como aumento del PIB) con desarrollo. A juicio del economista, esta noción se mantiene en la inercia del pensamiento neoliberal.

Para Jelvez el desarrollo de una sociedad se da en la conjunción de los siguientes factores: Crecimiento económico; capital humano; capital político y capital social. La Concertación avanzó en esta dirección, alcanzando logros económicos y sociales, sin embargo, para esta nueva etapa, no debe quedarse anclada en un “superávit de pasado y un déficit de futuro”, sostuvo el especialista.

Entonces, ¿qué se quiere cambiar para esta segunda etapa de desarrollo? Para Jelvez está claro, cambiar a Chile como una sociedad con múltiples asimetrías e inequidades (evidenciadas en indicadores como el índice Gini o el de movilidad social). Además, es indispensable enfocarse en alcanzar la heterogeneidad estructural de nuestra economía, la que debe ser superada logrando que todas las empresas puedan ser altamente productivas, de lo contrario, Chile estará condenado a ser inequitativo, ya que esta capacidad es la que define el nivel de salarios. También trabajar en pos de la formalidad del empleo y de la inclusión de la mujer y mayor participación laboral de ésta.

Con este escenario, ¿qué se debe hacer para asegurar una base que permita aumentar el gasto social? Y ¿qué podemos mantener del modelo instaurado por la Concertación? Por un lado aumentar la carga tributaria – que en nuestro país sólo alcanza al 17.1%, mientras el promedio en los países OCDE supera al 35% – y, por otro, sostener el modelo de desarrollo integral basado en más y mejor Estado; más cooperación en la construcción de políticas públicas; mejor mercado; más capital social; mejores sistemas políticos y mejor capital humano.

Entonces, ¿por dónde partir?, el especialista apuntó a la necesidad de reformular el rol del Estado en la economía.

Por su parte, Ricardo Ffrench – Davis nos habló de una “Estrategia de desarrollo económico”, que no es otra cosa que la visón humanista cristiana de desarrollo que involucra el crecer con equidad, revirtiendo el paradigma de la gente al servicio de la economía para pasar al de la economía a servicio de las personas. El economista sostuvo que la desigualdad no se corregirá sólo con gasto social, sino que con un mercado que funcione bien, esto es, al servicio de la gente y, para ello, se requiere de mayor carga tributaria. Contar con más recursos sólo es posible a través de la introducción de equidad al sistema productivo, buscando la sostenibilidad en el cómo mejoramos la vida de la gente.
Ffrench – Davis señaló que en términos de producción es muy importante la heterogeneidad estructural, ello, pues en nuestro país las empresas más productivas no lo son sólo a nivel nacional, sino que son de las mejores a nivel mundial. Con lo que se reafirma la idea del problema de la brecha en la capacidad para insertarse en el mercado, que se evidencia en las Pyme, con sus déficits de capacitación y competitividad, etc. Situación que graficó entregando el siguiente dato: De 800 mil empresas registradas en el SII, 15 exportan el 60%.

Para nuestro premio nacional, el crecimiento con equidad son complementarios, “es el camino” para alcanzar el desarrollo sostenible en el tiempo, con paz social y sentido de pertenencia.

Finalmente, el especialista hizo un llamado a poner atención en las características cíclicas de este mercado, para que no actuemos como si las actuales condiciones del precio del cobre fuesen eternas. Es indispensable mantener un buen fondo de estabilización, que permita que ante una posible “frenada” de la economía, no se experimenten situaciones recesivas y regresivas que hagan caer la inversión y con ello la capacitación, perpetuando la desigualdad.
Es tarea ineludible trabajar por crecer con equidad y, mientras se alcanza esta meta, integrar a aquellos que no tuvieron oportunidades, ofreciéndoles la capacitación que les permita su reinserción productiva.